Economistas respaldan a Georgieva, acusada de manipular el Doing Business de 2018
El Nobel Joseph Stiglitz y Jeffrey Sachs aseguraron que la acusación en contra del accionar de la actual titular del FMI, cuando era jefa de Operaciones en el Banco Mundial, tiene un tinte polÃtico y se da en el marco de la pelea entre Estados Unidos y China.
02/10/2021
Economistas de peso en el mundo de desarrollo económico como
el Nobel Joseph Stiglitz y Jeffrey Sachs, salieron a respaldar a la
titular del Fondo Monetario Internacional (FMI), Kristalina Georgieva,
quien por estos momentos afronta una acusación en contra de su accionar cuando
era Jefa de Operaciones en el Banco Mundial.
Stiglitz y Sachs dijeron que las denuncias tienen un tinte polÃtico y que se
dan en el marco de la pelea existente entre China y Estados Unidos.
La actual titular del FMI fue acusada de haber sido la responsable de
manipular un informe del Banco Mundial (Doing Business) con la
intención de favorecer a China, cuando ella era jefa de operaciones de la
entidad multilateral.
La acusación es el resultado de una investigación que lideró el estudio
WilmerHale para el Banco Mundial y que su titular, David Malpass, hizo pública
en septiembre último.
La noticia, que llegó apenas unas semanas antes de que
comience la cumbre anual del FMI y el Banco Mundial en Washington, prendió
fuego en el ámbito de las finanzas internacionales.
Tras la revelación del informe, el semanario británico The Economist
pidió la renuncia de Georgieva a la conducción del FMI, al considerar que
"socavó la credibilidad" del organismo multilateral.
Tras la crÃtica inicial, en los últimos dÃas economistas como Stiglitz hicieron
un análisis más minucioso del caso y consideraron que "el informe se basa
en gran medida en insinuaciones", o "pistas", más que en pruebas
concretas.
Stiglitz, en una nota de opinión publicada en la página especializada Project
Syndicate, ponderó la actuación y las iniciativas impulsadas por Georgieva para
afrontar la pandemia y la situación de los paÃses con crisis de deuda.
"Después de leer el informe de WilmerHale, de hablar directamente con las personas clave involucradas y de conocer todo el proceso, la investigación me parece un trabajo de hacha", sostuvo Stiglitz al relativizar los fundamentos en los que se basa la acusación a Georgieva.
"En todo momento, Georgieva actuó de una manera totalmente profesional, haciendo exactamente lo que yo habrÃa hecho (y ocasionalmente tuve que hacer cuando era economista jefe): instar a quienes trabajan para mà a asegurarse de que sus números sean correctos, o lo más precisos posible, dado que las limitaciones inherentes a los datos", se explayó el premio Nobel.
También el economista Jeffery Sachs publicó en el diario
Financial Times una nota de opinión en la que sostuvo que "el acalorado
ataque contra la directora gerente del FMI, Kristalina Georgieva, no se trata
realmente de la supuesta santidad de los datos del Banco Mundial o de la
calidad de su gestión, se trata del papel de China en una institución multilateral
con sede en Washington".
Sachs dijo que "muchos en el Congreso de los EEUU quieren que Georgieva
se retire porque no es una enemiga jurada de Beijing".
Asimismo, Sachs, exconsejero de Naciones Unidas para temas de desarrollo y
economista de la Universidad de Columbia, remarcó los párrafos de una carta
reciente de tres congresistas republicanos dirigida a la secretaria del Tesoro,
Janet Yellen, en la que critican a la actual titular del FMI.
Allà sostuvieron que las acusaciones contra Georgieva "ilustran cómo el Partido Comunista chino, al perseguir sus propios intereses, socava instituciones multilaterales como el Fondo, la Organización Mundial de la Salud y las Naciones Unidas. China se siente con derecho a tener más voz en la forma en que operan estas organizaciones internacionales; su falta de compromiso con los valores multilaterales demuestra por qué no se le debe permitir", advirtieron los legisladores.
La carta también pide al Tesoro de EEUU que informe sobre las "interacciones de la directora Georgieva con los representantes chinos en el Fondo" antes de la aprobación de la nueva asignación de DEG de 650.000 millones de dólares y la "promoción de China con respecto a posibles cambios en la participación accionaria" en el FMI.
Todo esto, según Sachs, "refleja la creciente obsesión de EEUU con China".
Stiglitz, por otro lado, también apunto sus dardos en contra
del actual titular del Banco Mundial, David Malpass.
"El verdadero escándalo es el informe de WilmerHale, que incluye cómo
David Malpass, presidente del Banco Mundial, escapa ileso", sostuvo
Stiglitz.
Esto es porque "el informe señala otro episodio, un intento de mejorar
Arabia Saudita en el Ãndice Doing Business 2020, pero concluye que el liderazgo
del Banco no tuvo nada que ver con lo que sucedió", agregó el economista.
Stiglitz acotó que por suerte "el periodismo de investigación ha
descubierto un comportamiento mucho peor, incluido un intento sin adornos de
Malpass de cambiar la metodologÃa de Doing Business para hacer que China
descienda en la clasificación".
Para Stiglitz, "no es sorprendente que haya algunos que no estén
contentos con la dirección que ha tomado el FMI bajo el liderazgo de Georgieva.
Algunos piensan que deberÃa ceñirse a su tejido y no preocuparse por el cambio
climático. A algunos les disgusta el cambio progresivo, con menos énfasis en la
austeridad, más en la pobreza y el desarrollo, y una mayor conciencia de los
lÃmites de los mercados".
Las negociaciones de la deuda argentina
Stiglitz también insinuó que el rol del FMI en la reestructuración de deuda
concretada por la Argentina el año pasado tuvo también que ver con la denuncia
en cuestión formulada contra Georgieva.
"Muchos actores del mercado financiero están descontentos de que el FMI no
parezca estar actuando con tanta fuerza como un cobrador de créditos... En
la reestructuración de la deuda argentina que comenzó en 2020, el Fondo mostró
claramente los lÃmites a lo que podÃa pagar el paÃs, es decir, cuánta deuda
era sostenible; debido a que muchos acreedores privados querÃan que el paÃs
pagara más de lo que era sostenible, este simple acto cambió el marco de
negociación", subrayó Stiglitz.
La respuesta del FMI
Al defenderse de las acusaciones, Georgieva, por su parte, dijo no estar
"de acuerdo esencialmente con los hallazgos e interpretaciones de la
investigación de irregularidades en los datos, en lo que respecta a mi papel en
el informe Doing Business del Banco Mundial de 2018".
En este marco, el directorio del FMI se reunió la semana pasada para
discutir el asunto.
"La Junta discutió las deliberaciones del Comité de Ética hasta el momento
y tuvo un intercambio preliminar de puntos de vista sobre el informe y la
declaración del Director Gerente en respuesta a él", dijo de manera
escueta una fuente del FMI, que indicó que habrá más reuniones para tratar el
caso.
Fuente:telam.com.ar
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