Milei perdió el control de la agenda política al tocar un nervio sensible: la educación pública superior
El plan "motosierra" despertó en los últimos días una robusta respuesta de parte de la comunidad educativa que se verá unificada y reflejada en las calles del centro porteño el próximo martes.
20/04/2024
El Gobierno tocó un nervio sensible al decidir
impulsar también su plan “motosierra” en el ámbito de la educación pública, en
especial, la superior, considerada por una amplia y heterogénea porción de la
población, como un eslabón indispensable de cualquier intento de
movilidad social ascendente en la Argentina.
Quienes se estén formando o se hayan formado como
profesionales en universidades del Estado probablemente lleven
"puesta" esa camiseta durante el resto de sus días: así de fuerte
y de indisoluble suele ser el vínculo, y el sentido de pertenencia, que se
genera durante el paso de decenas y decenas de miles de
estudiantes todos los años por las aulas de esas instituciones.
El Gobierno, con el presidente Javier
Milei a la cabeza, se enfrascó en los últimos días en una disputa con
la comunidad educativa superior probablemente sin medir las
consecuencias, o bien soslayándolas, y terminó perdiendo el control de la
agenda política nacional. El jefe de Estado, en ese contexto, buscó
argumentar su determinación de podar el presupuesto de la Universidad de Buenos
Aires (UBA), por ejemplo, en supuestos casos de adoctrinamiento y de
persecución ideológica en facultades de esa casa de estudios, aunque
sus planteos fueron rápidamente refutados por autoridades académicas.
En realidad, Milei, que por cierto suele recurrir a
lenguaje sumamente agresivo al referirse a quienes disienten de su forma de
pensar, es correcto que señale lo que él observa como irregular dentro del
ámbito universitario, pero lejos de proponer una discusión superadora,
desde el punto de vista pedagógico, su postura, por el contrario, fue la de
tratar de justificar de alguna manera el ajuste que intentaba
motorizar.
Si bien es válido también que el Gobierno procure auditar
las cuentas de las universidades públicas y en el caso particular de la
UBA, en qué se invierten/gastan los recursos que esa entidad recibe del
Estado y si existen irregularidades en el manejo de esos fondos, el plan
"motosierra" que ensayó Milei despertó en los últimos días una
robusta respuesta de parte de la comunidad educativa que se verá
unificada y reflejada en las calles del centro de la ciudad de Buenos Aires el
próximo martes.
Ese día está previsto que se realice una masiva
marcha en defensa de la educación pública, con la participación de alumnos,
profesores, ex estudiantes y ex docentes, autoridades universitarias nacionales
y hasta referentes políticos, y de sectores sindicales, más allá de los
intentos de última hora del Gobierno por evitar que la movilización se
lleve adelante, abriendo nuevamente el grifo y prometiendo más recursos para
las casas de estudio.
Marcha universitaria: una foto incómoda para el Gobierno
Así como en semanas anteriores fueron la actriz y cantante
Lali Espósito primero, y luego el periodismo argentino -con denuncia penal
incluida de parte de Jorge
Lanata en contra del jefe de Estado por difamación-, Milei
amplió su abanico de "enemigos" de ocasión al incluir a las
universidades públicas en su nómina, aunque no con el propósito de
deliberar sobre su funcionamiento, sino con el fin de guadañar sus
presupuestos: "Hay que ajustar gastos en todos lados",
expresó al respecto el ministro del Interior, Guillermo Francos.
La embestida en contra de la UBA -una de las universidades más prestigiosas del mundo hispano- y de las entidades médicas que de ella dependen, le valdrá al Gobierno toparse el próximo martes con una foto incómoda y que echará por tierra cualquier intento de bajarle el tono a la protesta blandiendo la diatriba de "la casta" y los privilegios que el oficialismo, en teoría, procura dinamitar: serán autoridades educativas, estudiantes y profesores los que encabezarán la movilización. Es más, es probable incluso que muchos de ellos hayan votado a Milei en las últimas elecciones presidenciales.
En este sentido, en el ámbito político doméstico causó
sorpresa la arremetida del jefe de Estado especialmente contra la UBA, viendo
cómo su cruzada precipitó un incremento de su imagen negativa en determinadas
encuestas de opinión. Por ejemplo, un trabajo de la consultora Ad-Hoc mostró
este viernes que el conflicto con esa casa de estudios impactó de lleno
en la reputación digital del Presidente, al igual que la decisión de los
senadores de aumentarse a mano alzada los sueldos y los recientes ascensos dispuestos
en Balcarce 50.
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Libertad Avanza y el PRO presentarán proyectos para dar marcha atrás con el
“dietazo” del Senado
En ese contexto, seis de cada 10 menciones sobre
Milei en redes sociales fueron negativas el último día hábil de la
semana, en la que el Gobierno perdió el control de la agenda política
nacional al permitir que el agua le llegara al cuello por la
repercusión mediática del revuelo universitario. Asimismo, el concepto
"casta", en el ecosistema digital -un universo en el que el
líder libertario suele moverse con notoria ductilidad-, volvió a ser
utilizado como una crítica hacia el oficialismo, según Ad-Hoc.
Si bien el Gobierno logró frenar por ahora la
voracidad de las empresas de medicina prepaga, que propulsaban una
disparatada suba de las cuotas que deben pagar los afiliados, y así consiguió
calmar un reclamo cada vez más enérgico de parte de la clase media,
especialmente, el martes que viene deberá lidiar con un momento poco agradable
con la marcha que se avecina: genuina y sin estructuras ni grandes
aparatos políticos que la estén azuzando.
La manifestación se producirá una semana antes de otra
movilización, que también promete ser masiva, el próximo 1° de mayo,
convocada y fogoneada -esta sí- por el sindicalismo, con la Confederación
General del Trabajo (CGT) a la cabeza, en la antesala del paro nacional
anunciado para el jueves 9 del mes que viene. En el Gobierno, de todos
modos, mantienen la esperanza de poder desactivar la huelga general, mientras
en filas del movimiento obrero algunos dirigentes insisten en la necesidad de
analizar el escenario "con más criterio estratégico y no con tanto
músculo, pensando en una disputa a largo plazo", como se escuchó
comentar a un secretario general de un gremio de docentes en la última reunión
del Consejo Directivo Nacional de la CGT.
El gremialismo también mira encuestas: ¿Milei sube o
baja?
"El sindicalismo hoy no tiene un rumbo establecido,
porque a pesar del ajuste no existe por el momento un clima de descontento
social palpable. Entonces, el sindicalismo hoy está mirando encuestas,
viendo cómo suben o bajan los niveles de apoyo a Milei", dijo a Noticias
Argentinas una fuente cercana a la central obrera. "La CGT no
se puede poner hoy al frente del reclamo social, porque ese reclamo social no
está. Hoy la gente dice, ‘Yo me banco el ajuste porque no quiero que
vuelva el peronismo’. Eso es lo que está sucediendo", agregó.
La misma fuente indicó que en filas gremialistas
admiten que "se viene una reforma laboral" en la Argentina. Y a
propósito, está previsto que se incluya un capítulo en tal sentido en el nuevo
borrador de la Ley de Bases bis que la Casa Rosada enviaría al
Congreso el próximo lunes, luego de conversaciones de última hora con
legisladores de la oposición dialoguista para ajustar detalles y demás
"letras chicas" en la propuesta libertaria.
Dirigentes radicales, del macrismo y de Hacemos Coalición
Federal se reunieron con funcionarios del Gobierno después de que en Balcarce
50 introdujeran modificaciones al texto, incluso en asuntos que, según aseguran
en pasillos del Congreso, ya estaban acordados. Por ejemplo, instrumentar
un "premio al buen contribuyente", tanto para personas
físicas como jurídicas en el paquete fiscal. "El oficialismo
primero dijo que sí y luego decidieron quitarlo del proyecto", indicó
a esta agencia una fuente parlamentaria. También con el proceso de disolución
de los Fondos Fiduciarios estatales existían discrepancias, al
igual que con los plazos para actualizar el piso del impuesto a las
Ganancias: el Gobierno plantea que se ajuste anualmente y la oposición
dialoguista, cada tres meses.
Se espera que la remozada Ley Ómnibus II sea tratada hacia
fines de este mes en la cámara de Diputados, algunos días después de lo que
estaba previsto: "Las demoras tienen más que ver con las internas de
ellos que con otra cosa. Eso es algo ajeno a la predisposición de la
oposición dialoguista", indicó la fuente consultada por NA.
"Todo este proceso ya generó incluso cierto hartazgo -en
el ámbito legislativo-. Entonces lo que muchos comentan es, ‘Bueno, que
tengan su ley, que tengan su plan y que se pongan a gestionar de una vez’.
Porque lo que se sigue viendo es bastante inoperancia por parte del Poder
Ejecutivo", acotó.
Esta discusión crucial para el Gobierno se producirá en un
contexto que encuentra a Milei aún intentando motorizar su primera resolución
estratégica en el Parlamento en casi cinco meses de mandato. En ese
lapso, propugnó un ajuste fenomenal que combinó su tan mentado plan
"motosierra" con un marcado proceso de empobrecimiento de la
sociedad, con motivo de una inflación que carcomió el poder
adquisitivo del salario.
Según un estudio de la Universidad Torcuato Di Tella, en
el primer trimestre de 2024 unas 3,2 millones de personas cayeron en la pobreza,
situación en la que se encontraría actualmente el 51,8 por ciento de la
población argentina. "Lo que nosotros notamos es que la gente está
comiendo peor, en todos los estratos sociales: se pasó de primeras marcas a
segundas y de segundas marcas a terceras", dijo a Noticias
Argentinas una fuente del conurbano bonaerense profundo. "Y la
cantidad de chicos en comedores comunitarios subió, pero el Gobierno nacional
dejó de entregar alimentos. Desde enero que no entrega alimentos, en el
formato que sea. A nosotros no nos preocupa en qué formato los entregue, lo que
sí necesitamos es que los entregue", añadió. "La situación
está realmente complicada", subrayó.
Por último, y en este contexto, en la zona norte del Gran
Buenos Aires se preparan para un aumento de la inseguridad:
"Cuando la situación económica es desfavorable, suben los índices
delictivos. Eso ya sabemos que es así", planteó una fuente cercana a un
intendente de esa región. "Lo que esperamos es al menos igualar este
año los índices de 2023. Si eso sucede, sería un éxito para nosotros",
completó en diálogo con esta agencia.
Funte:noticiasargentinas.com
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