Alarmante: un médico argentino cobra como en Bangladesh pero las prepagas son las más caras del mundo
Los profesionales de salud perciben remuneraciones entre las más bajas del mundo para atender a pacientes que pagan la medicina privada más onerosa.
10/05/2024
Un médico en Argentina gana el equivalente a
US$5.280 al año, contra los aproximadamente más de US$350 mil que cobra un
colega en Suiza y Estados Unidos; 200 mil en Canadá; 115.000
en China; 57.000 en España; 47.000 en Brasil;
23.864 en Filipinas; 11.581 en India, y 7.084
en Bangladesh.
Solo en Venezuela y en Cuba la expectativa
de ingreso es peor, según el ranking de 2023 del World Statistics.
Por el contrario, el costo promedio de las
prestaciones en el país es de US$555 frente a los 500 de Estados
Unidos, 520 de Japón o 480 de Francia, de acuerdo con el relevamiento de la
consultora Javier Miglino y Asociados.
Ya el Instituto Argentino de Análisis Fiscal (IARAF) había
advertido que los precios de los servicios de salud en Argentina habían
aumentado 13 veces más que en el resto del mundo en marzo-abril de 2022.
Pero al desregularse la actividad con el nuevo
gobierno, los incrementos se multiplicaron: 40% en diciembre; 30% en
enero; 20% en febrero, 19% en marzo y entre 16 y 19% en abril.
Paradójicamente, el salario médico promedio en
nuestro país ascendía US$350/400 mensuales, versus entre 3.500 y 4.500 de
un uruguayo y 3.000 de un brasileño. O sea, 10 veces menos.
El debate sobre los valores de las prepagas, sin
embargo, se centra sobre los costos crecientes de la salud, por un
lado, y la incidencia que tienen en el bolsillo de los consumidores, en su
mayoría miembros de clase media, como lo son los profesionales
de la salud.
"Las medidas hasta ahora adoptadas son magras y no
atacan el problema de fondo, que es la enorme masa de dinero que se
pierde en una distribución anárquica con una intermediación monstruosa fuente
de ingresos corruptos –médicos y no médicos–, sindicalistas y otros aventureros
que aprovechan el descontrol para vender insumos por valores varias veces
superiores aún a los precios del exterior y así mantienen esta
bicicleta poco virtuosa funcionando", señala Omar López
Mato, miembro de la Cámara de Medicina Oftalmológica (Cameof).
¿Por qué hay ocho obras sociales distintas para atender al
personal de la industria petrolera y afines?, pregunta en esa dirección.
El secretario general de la Cámara de Medicina Oftalmológica
(CAMEOF), Juan M. Ibarguren, mientras tanto, había
comparado la evolución de los valores entre diciembre de 2019 y el
mismo mes de 2023, o sea, en la gestión completa de Alberto
Fernández.
Puso así de relieve que la inflación acumulada en
esos cuatro años fue 1.559%, contra 1.676% que subieron los costos de la salud,
el 1.636% que percibieron las empresas de medicina prepaga y el 991% que se
incrementaron los aranceles médicos.
En la escala quedó en evidencia que la brecha de este
período en términos de valores acumulados con respeto a la inflación fue del
721%. Entre 2005 y 2018 había sido del 153%.
Desfinanciamiento
Comparándolo contra la evolución de los costos daría 838%, y
plazos de pago promediando 60, 90 y en algunos casos 120 días, lo que deja en
claro el desfinanciamiento.
La inflación acumulada entre diciembre de 2018 y
diciembre 2023 alcanzó el 1.175%, mientras la del sector salud fue del
1.380%, las empresas de medicina prepaga aumentaron 767% y los aranceles
ajustaron un 690%.
De 2005 al 2020, las Obras Sociales y las Empresas de
medicina prepaga incrementaron 46 veces sus ingresos, fue la
conclusión que extrajo.
La medicina privada atiende aproximadamente un total
de seis millones de personas: dos millones son voluntarios y cuatro
millones son trabajadores que pertenecen a una obra social administrada por una
empresa de medicina prepaga.
Los incrementos que se dispararon en las cuotas hicieron
que unos 200 mil afiliados se pasaran a la medicina pública, cuya
capacidad para absorber pacientes se encuentra en un límite, al atender
a poco más de un tercio.
El costo de la salud no lo representan
únicamente los sueldos médicos, ni mucho menos.
La estructura del gasto en salud, hace tres
años, ubicaba a los medicamentos en el 19% de la torta.
El resto se distribuía entre profesionales,
sanatorios, tratamientos especiales, etc.
Actualmente, los medicamentos saltaron al 40% de ese
presupuesto.
De modo que no sólo se está produciendo un traslado
al sector público de personas que no pueden afrontar el nivel al que se
llevaron las cuotas de la medicina privada, sino que la Confederación
Farmacéutica Argentina informó que en enero y febrero las farmacias
vendieron diez millones de unidades de medicamentos menos.
Obra social prepaga
La consultora Javier Miglino y Asociados entrevistó personas
de todo el país "con obra social prepaga para comparar los
costos con otros países".
Los entrevistados cuentan con Osde, Sancor Salud,
Omint, Swiss Medical, Galeno, Medicus, Hospital Italiano, Simeco, entre
otros; en valores de $290 a 650 mil por grupo familiar (matrimonio y
dos chicos), dando un costo promedio de $470 mil.
Con el dólar oficial en $ 846, equivale a US$555, con lo
que Argentina tiene el costo promedio por obra social privada más alto
del mundo, indicaron desde la consultora.
Y cruzaron el dato: el costo promedio por las mismas
prestaciones (cuatro personas), en EEUU es de US$500, en España 440, Italia
460, Francia 480 y Japón 520.
"Una vez más debemos lamentar este récord, en
este caso en la tarea médica, desempeñada en un 100 por ciento por
profesionales argentinos, en establecimientos locales y con insumos en un 99 %
nacionales. Una muestra más de que los argentinos debemos sufrir
costos desproporcionados, no solamente en relación con los salarios que distan
muchísimo de los que se cobran en el Primer Mundo, sino también en relación
costo-servicio, toda vez que, en dólares, los servicios de
medicina privada son más caros en nuestro país que en el resto del mundo",
indicó la consultora.
La encuesta se llevó a cabo a más de 5 mil personas en la
Ciudad Autónoma de Buenos Aires y las provincias de Buenos Aires, Mendoza,
Córdoba, Santa Fe, Misiones, Neuquén, Río Negro, Salta, Chaco, Corrientes y
Formosa.
En muchos países de Europa, el sistema de salud, incluyendo
la provisión de medicamentos, funciona de manera eficiente.
Allí todos contribuyen a un sistema de salud básico
y universal que es obligatorio y al que todos pertenecen. Este sistema
garantiza un acceso mínimo, esencial y efectivo para todos los
ciudadanos.
Si alguien desea acceder a servicios más especializados y
costosos, tiene la libertad de hacerlo.
Sin embargo, desde el principio, todos están cubiertos por
este sistema.
Los pioneros de este enfoque fueron los alemanes, y hoy en día,
toda Europa desarrollada lo adoptó.
Los sindicatos no tienen influencia en este sistema.
Fuente:noticiasargentinas.com
No hay comentarios